6 consejos para empacar con eficiencia

Ya las vacaciones están aquí, así que en verano nos preparamos para ese viaje que llevamos un año planificando. Tenemos pasaje, reserva y todo en mano para hacer una estancia agradable. Bueno, casi todo.

Una de las cosas inevitables pero engorrosas de viajar es hacer la maleta. Si nos descuidamos, terminaremos por acarrear dos o tres maletas de aquí para allá, siempre en duda de dejar nuestro equipaje desprotegido y “paseando” cosas que al final no usaremos.

Aquí te damos algunos sencillos consejos sobre qué y cómo empacar para que disfrutes tu viaje de placer sin preocupaciones.

Cómo Armar una Maleta con muchas cosas

Infórmate: ¿Hace frío o calor en tu destino? ¿Llueve o hay buen tiempo? Lo mejor no es creer en las guías turísticas, busca en internet el día en que vayas a empacar el estado del tiempo y el pronóstico a lo largo de tu estancia. 

Mesura con la ropa: No necesitas una muda para cada día. En todos los lugares turísticos hay opciones para lavar la ropa, y en última opción el lavamanos y el jabón te sacan de un apuro. Lo ideal es utilizar ropa combinable, para ir variando sin aumentar el volumen. Máxima de oro: si algo se demora mucho en secarse o hay que plancharlo, no lo lleves.

Enrolla: La ropa enrollada ocupa menos espacio y se estruja menos que doblada.

Ponte lo más pesado: Las restricciones de peso se aplican a las maletas y el equipaje de mano. Pero lo que llevas encima no. Si algo es voluminoso mejor llevarlo puesto, ya en la cabina del avión te lo sacarás.

Lleva lo que uses: Si vas por una semana, no necesitas champú ni maquillaje para dos meses. Vierte lo necesario en recipientes más pequeños y compactos. Recuerda que un litro de agua pesa un kilogramo, y un líquido más denso pues mucho más.

Limita la tecnología: Laptop, tablet, cámaras, trípodes, lentes, psp, audífonos, teléfonos, cargadores, baterías y memorias de repuesto…todo lo necesario para que tengas miedo a dejarlo en la habitación  y quieras llevarlo contigo. Y tendrás miedo entonces que te asalten y te lo roben. Cuando menos, los kilos extras te darán un dolor de espalda de seguro. Hoy en día un buen teléfono con cámara y WiFi o un tablet son más que suficientes. De ser posible, que todo use el mismo cargador.